jueves, 28 de octubre de 2010

Prescripción y usucapión o Fernando Sánchez Dragó en "modo ideario PP"

Prescripción es la palabra de moda en el Partido Popular. Tras ella, una ingente cantidad de alcaldes, concejales y dirigentes de la derecha española han amasado enormes fortunas en forma de comisiones ilegales y cohechos, cuando no metiendo la mano directamente en las arcas públicas. Gracias a ella hace ya tiempo que dejó de preocuparles ser sorprendidos en sus acciones delictivas.




prescripción.
(Del lat. praescriptĭo, -ōnis).

1. f. Acción y efecto de prescribir.

2. f. ant. Introducción, proemio o epígrafe con que se empieza una obra o escrito.
~ adquisitiva.

1. f. Der. usucapión.
~ extintiva.

1. Modo de extinguirse un derecho como consecuencia de su falta de ejercicio durante el tiempo establecido por la ley.

usucapión.
(Del lat. usucapĭo, -ōnis)
.


1. f. Der. Adquisición de una propiedad o de un derecho real mediante su ejercicio en las condiciones y durante el tiempo previsto por la ley.

El adalid intelectual del Partido Popular de Madrid, Fernando Sánchez Dragó no defrauda nunca a los suyos. Cuando aún no ha amainado la polémica provocada por las machistas y muy ofensivas palabras del alcalde de Valladolid sobre "los morritos de Leire Pajín" y los recuerdos que estos le evocan, el "niño bonito" de Esperanza Aguirre en Telemadrid -la trinchera informativa de la lideresa- toma el relevo de la polémica en su libro de conversaciones con Albert Boadella Dios los cría.... Narra cómo se folló -en palabras literales extraídas del citado libro- a dos niñas de 13 años en Japón, a las que además define como lolitas provocadoras que se lo "trajinaron", usando el propio lenguaje del otrora autor de prestigio y hoy vividor a cuenta de los gobiernos de Esperanza Aguirre. [En torno a dos millones de euros del dinero de todos los madrileños le ha pagado Aguirre a Sánchez Dragó por los evidentes servicios prestados.] En el libro, Sánchez Dragó también afirma que su nimio poder adquisitivo de entonces no le hubiese impedido extender un cheque con todos sus ahorros por lo favores recibidos. En el momento de hacerse público el contenido de Dios los cría... Sánchez Dragó se encontraba, precisamente, en Japón, sin que se sepa si llevaba la chequera ni qué uso podría estar haciendo de ella con el dinero que los madrileños y las madrileñas hemos aportado a su cuenta corriente. Remata Sánchez Dragó su relato presumiendo de contar ahora aquella anécdota porque sucedió hace mucho tiempo y el delito, pues, ha prescrito.

De lo reprochable de sus palabras y su comportamiento -ahora y entonces- dan buena cuenta la enorme repercusión que han tenido en diferentes medios de comunicación y, sobre todo, en las redes sociales, especialmente Facebook, donde las entradas recriminando la pederastia confesada del escritor admirador y beneficiario de Esperanza Aguirre se cuentan por miles desde ayer. Lo preocupante, más allá de la comisión de un delito es cómo el antes escritor de prestigio se ufana de poder contarlo porque ha prescrito. Se suma a la considerable lista de allegados y políticos del Partido Popular que se benefician de la enorme cantidad de indultos encubiertos que el aún lento y defectuoso sistema judicial español viene procurándoles, empezando por Carlos Fabra y continuando -pues no parece que haya fin- por Fernando Sánchez Dragó. Los populares y sus satélites han aprendido a transmitir que si hay prescripción no hay condena, y consiguen traducir esto -con éxito, no hay más que mirar al Levante español- en si no hay condena, no hay delito.

Prescripción es, pues, la palabra de moda en el Partido Popular. Tras ella, una ingente cantidad de alcaldes, concejales y dirigentes de la derecha española han amasado enormes fortunas en forma de comisiones ilegales y cohechos, cuando no metiendo la mano directamente en las arcas públicas. Gracias a ella hace ya tiempo que dejó de preocuparles ser sorprendidos en sus acciones delictivas; lo que les preocupa en realidad es que lo sean antes de que haya pasado el tiempo necesario para que el delito haya prescrito. Bien manejado el calendario judicial, esos delitos de cohecho, malversación o robo, devienen "prescripción adquisitiva" o usucapión, que como define el diccionario de la RAE, es la Adquisición de una propiedad o de un derecho real mediante su ejercicio en las condiciones y durante el tiempo previsto por la ley. En lenguaje popular, derecho a hacer con el dinero y los recursos de todos todo aquello de redunde en beneficio propio y en daño del contrario o rival. Lo entienden así, como un derecho implícito que debe ser asumido por la población en su imaginario sobre el 'fenotipo político', y no están dispuestos a renunciar a ese perverso uso de tal derecho durante "el tiempo previsto por la ley". O dicho de otro modo, mientras la manipulación y la mentira les permita mantenerse en los puestos desde los que cometen sus abusos y delitos legislatura tras legislatura.

Hay una vacuna contra este mal, el voto activo y responsable. Próxima campaña de vacunación el 22 de Mayo.