domingo, 13 de mayo de 2012

La voz del pueblo no es ilegal

Publicado en Diario Progresista


Espectacular y sobrecogedor. El ´grito de silencio´ que tuvo lugar en el minuto cero del día de hoy en la Puerta del Sol, sin duda erizó la piel de las miles de personas que participaron en él. Si la unión hace la fuerza, el kilómetro cero de Madrid era una plaza fortificada al cierre de esta edición de Diario Progresista. Decenas de miles de personas unían sus voces de protestas contra las medidas tomadas por el Gobierno y dictadas por "los mercados". La noche prometía ser larga.
La voz del pueblo no es ilegalDesafiando el ‘toque de queda’ que había dictado la Delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes, y demostrando que el discurso que hace un año llenó las plazas de España de acampadas de protesta sigue más que vivo, más de 50.000 personas esperaban las campanadas del reloj de la Casa de Correos al grito de “la voz del Pueblo no es ilegal”. Escenas similares se daban en el resto de España. Otras consignas ya conocidas, como que “no nos representan” y “lo llaman democracia y no lo es” protagonizaron los cánticos propios del movimiento nacido el 15 de mayo del pasado año.

Si la que comenzó ayer fuera realmente una movilización antisistema, el sistema debería preocuparse. Sin embargo, como ocurrió hace un año, las miles de personas que ayer ocuparon varias capitales de provincia en España (y hasta 160 en el resto del mundo) no luchan contra el sistema. Ayer, como entonces, los indignadossalieron a la calle porque lo que quieren es que el sistema funcione como debería. Como la organización social en la que todos caben y todos pueden convivir en igualdad de oportunidades. 

En 2011, la movilización que derivó en la conocida como #acampadasol (y las otras) protestaba contra las medidas que se estaban tomando para paliar los efectos de la crisis, en 2012. Sin embargo, el movimiento 15-M ha demostrado cierta madurez organizativa renunciando a montar de nuevo las acampadas que mantuvieron en jaque a las autoridades el año pasado, pero no a tomar la calle como forma de protesta. Si las medidas tomadas por el gobierno socialista al albur de los dictados impuestos por “los mercados” congregaron a miles de personas en Sol, no cabe duda de que el movimiento de “los indignados” consideran que el nuevo gobierno, el presidido por Mariano Rajoy, han superado todas las expectativas de agresión a la ciudadanía, y las imágenes de Madrid en los primeros minutos de este domingo harán historia.

La jornada comenzó a las seis de la tarde de ayer con la salida de las diversas columnas llamadas a ocupar el kilómetro cero. Transcurrió en un ambiente de absoluta normalidad y sin que se registrara ningún tipo de acción violenta por grupos incontrolados. A medida que avanzaban las columnas ya era imaginable que las restricciones impuestas por la Delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes se pudieran cumplir. Cualquier intervención policial que pretendiera desalojar a los manifestantes sería una irresponsabilidad por parte de las autoridades, pues la más mínima estampida podría terminar de forma imprevisible en tal marea humana. En torno a las once de la noche, se convocaba un gabinete de crisis en la Delegación del Gobierno que decidía no intervenir policialmente contra los manifestantes.

El éxito de la convocatoria, en Madrid y el resto de ciudades ocupa hoy la mayoría de las portadas de los principales medios de comunicación de todo el mundo. El Ministerio de Interior, poco antes de la medianoche hacía públicas sus propias cifras, que situaban a unas 30.000 personas en la Puerta del Sol, una cifra sensiblemente inferior a las que se dieron, por ejemplo, la última celebración del año nuevo en el mismo sitio. En Barcelona, el ministerio aseguraba que se habían manifestado unas 22.000 personas y otras 8.000 en Valencia. Ninguno de esos cálculos parece corresponderse con las cifras reales que se registraron ayer en las principales ciudades españolas.

Al publicarse esta noticia, nadie podía prever qué va a ocurrir en la Puerta del Sol. La Delegación del Gobierno anunció que no habría intervención policial si no se producía ningún tipo de acampada. Es decir, si no se instalaban tiendas de campañas o esterillas para dormir. Pero la decisión de los manifestantes no parecía que fuera a tener en cuenta la advertencia de Cristina Cifuentes y habrá que esperar a ver cómo se suceden los acontecimientos en las próximas horas y días, hasta el martes.

El movimiento 15-M demostró ayer su capacidad de convocatoria y superó todas las expectativas en su intención de llamar la atención del Gobierno y de la clase política general. Los indignados recuperaron ayer las plazas en el primer aniversario de las movilizaciones de 2011. La ocupación pacífica de las calles está prevista que dure hasta el próximo martes, y ya se trabaja en nuevas acciones encaminadas a lograr un cabio de rumbo en las políticas anticrisis y en la propia concepción de las políticas económicas y sociales desarrolladas en todo el mundo.